Turronería Iváñez, desde 1855 fabricando los mejores turrones en Bilbao

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Al pasear por el centro de Bilbao es muy fácil reparar en un emblemático establecimiento que ocupa un gran espacio, que conserva un aspecto histórico y desprende un delicioso aroma dulce. Cantidad de transeúntes casuales tienen la tentación de parar en él, mientras que buena parte de los lugareños ya lo tienen como un local de referencia y de “toda la vida”.

No es otra que la turronería Iváñez, una de las mejores en su especialidad y de las pocas que todavía conserva la misma esencia que en el año 1855, cuando abrió sus puertas por primera vez. Un negocio familiar con encanto, de esos que ya son difíciles de encontrar y en los que prima el buen hacer sobre todas las cosas.

Una turronería con historia

Los orígenes de esta turronería especializada se remontan a la segunda mitad del siglo XIX, cuando en el año 1855 Miguel Galiana fundó el primer local de TurroneriaIvanezBilbao, por aquel entonces con otro nombre y situado en la calle Bidebarrienta.

Fue una época en la que el turrón no se comercializaba bajo grandes marcas, pues se elaboraba de una forma artesanal, se llevaba a los establecimientos por bloques y se ponía a la venta al peso. Cuando el negocio pasó a la siguiente generación, ya ganó mucha notoriedad en la ciudad de Bilbao y se convirtió en sinónimo de calidad.

En los años 50 la marca Iváñez ya estaba instaurada gracias a Eladio Iváñez, abuelo de las generaciones que ahora lo regentan, y disponía de varios locales en la ciudad. Era un negocio en pleno crecimiento que hacía las delicias de los bilbaínos y al que acudir, especialmente, en fechas señaladas como la navidad.

Con el paso de los años, esta turronería fue cambiando de ubicación y mejorando más si cabe la calidad de su producto. Conservó su filosofía en todo momento, ya que siguió en manos de la misma familia y con idéntica entrega en cada nueva hornada.

Ahora está liderado por la cuarta generación y tiene un papel muy importante en la ciudad, pues se trata de un establecimiento de referencia. Sus dulces tienen ese sabor de siempre, ese gusto que recuerda a lo casero y lo artesano.

Elaboración artesanal en productos diversos

En la actualidad, se pueden encontrar cantidad de dulces y turrones en este establecimiento, todos ellos elaborados con los sistemas tradicionales, con mimo y buscando las materias primas más adecuadas.

No faltan diferentes tipos de turrones, por supuesto, pero también disponen de gustosa fruta confitada, mazapanes, almendras al chocolate, peladillas o dulces sin azúcar para los que quieren guardar la línea sin tener que resistirse a un capricho.

En el coqueto local es posible recoger sus creaciones para llevar, como ocurre con la mayoría de las turronerías, pero también cuenta con una terracita exterior en la que degustarlos cuando nos entre el antojo de forma inesperada.

Es un establecimiento al que acudir en todas las épocas del año, pues también hacen estupendos helados artesanos de primera categoría con los que refrescarse durante el verano. No hay excusa para no darse el gusto de vez en cuando.

Los que no tienen tiempo de ir personalmente a por sus dulces, también lo tienen más fácil que nunca. Este negocio supo adaptarse en cada momento a los tiempos que corren, por lo que cuenta con una tienda online en la que comprar todo tipo de productos a distancia que llegarán cómodamente a casa y sin que nos tengamos que preocupar por nada.

Los tipos de turrones que encontrarás en turronería Iváñez

Como es de esperar, en la turronería Iváñez hay variedades de turrones tradicionales para todos los gustos. Es uno de esos lugares en los que cuesta decidirse, porque cada receta tiene algo especial y mucha historia detrás.

Para que te hagas una idea y puedas ir escogiendo tus favoritos, te mostramos los principales tipos de turrones que podrás encontrar aquí.

El turrón de Jijona

Esta saga familiar es oriunda de Jijona, por lo que el clásico turrón a base de almendras molidas en miel es una de sus grandes especialidades y lo fabrican precisamente en esta localidad, donde garantizan el sello del consejo Regulador e indicación geográfica protegida. Lo hacen de una forma completamente artesana, siguiendo los procesos de manera manual y poniendo empeño en cada receta.

El turrón de Alicante

El turrón de Alicante es un dulce más duro y robusto, otro clásico de la navidad y el favorito de muchos comensales. En su receta emplean una gran proporción de almendras Marcona mezcladas de una forma muy delicada con miel de romero, como leemos en este artículo de QueGustodeMundo. Empleando este equilibrio perfecto hacen que este dulce sea más sabroso y también más sencillo de comer, pese a su aparente dureza.

El turrón de yema tradicional

El turrón de yema tiene una larga historia, pues esta receta nació en la antigüedad como una forma de aprovechar las yemas que se desechaban al hacer los turrones tradicionales. Hoy en día, su elaboración en todo un arte y tiene una gran cantidad de golosos aficionados. En la turronería Iváñez se elabora con yema natural confitada y siguiendo la misma receta y el mismo proceso que se empleó en el año 1855. Pertenece a la categoría de los turrones de obrador y es otro de los productos más demandados.

El turrón de fruta

El turrón de fruta impacta por su belleza visual, ya que es uno de los más coloridos e incluso decorativos de entre las elaboraciones tradicionales. En este establecimiento lo hacen empleando tres capas de frutas glaseadas mezcladas con su mazapán de elaboración artesanal, por supuesto.

Otros dulces

Cabe resaltar que, más allá de los turrones, en turronería Iváñez se elaboran otros dulces sabrosos y cuidadosamente creados a mano. Destacan sus famosos polvorones con un tueste perfecto; los pasteles de gloria elaborados artesanalmente y a lo largo de una semana, tal y como manda la tradición; el exquisito pan de Cádiz o los perritos de mazapán hechos uno por uno con todo el mimo del mundo.